Que el viejo mundo se destruya.
Que el nuevo mundo que se asoma también se destruya.
Tan nuevo, con el omnipresente control digital, con la masa empedrada frente a las pantallas, con la ingeniería genética que toca los cimientos de la vida.
Tan viejo, como la autoridad en todas sus formas, brutal o sutil, con el miedo a la libertad individual y única, con el hábito del conformismo.
Aprovechamos la luz de la luna detrás del cementerio Père Lachaise para prender incendiar a una camioneta de Enedis [sucursal de Electricicité de France que se ocupa de la distribución de electricidad], en la rue des Rondeaux [en París], en la noche entre el 14 y 15 de mayo [2020].
Para dar algunos golpes a quienes hacen vivir esta pesadilla tecnológica.
Para no renunciar.
Para enviar un mensaje de solidaridad a nuestro compañero Damien: ¡espera!
Bandidos enmascarados
[Traducción: Anarquía.info]
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